La comida puede ayudar a las parejas a despertar o conservar su apetito sexual.  Solo hay que ser creativos y vincular un par de alimentos al momento íntimo.

El primer alimento que puedes poner sobre las sábanas es de sabor agridulce: las fresas son perfectas para una noche de sexo. Se puede incluir una crema batida para endulzar el momento, y por qué no, pasar por el ombligo, espalda, senos y boca una de estas deliciosas frutas en compañía de la crema batida.

Otro alimento que se desliza con suavidad por el cuerpo es el chocolate líquido. Si no eres muy amigo del dulce, puedes limitarte a usarlo para dar un masaje, pero si te encanta su sabor, puedes untarlo y retirarlo con la lengua, por supuesto.

Los alimentos salados también se pueden incorporar en la cama. El sushi y los calamares son algunos de los más comunes. Sin embargo, la elección depende de gustos particulares. Alguna vez escuché a alguien decir que le excita untar espaguetis ¡Qué la imaginación vuele!

Una cuarta opción son las bebidas. Si se trata de un momento romántico, un poco de vino o champaña puede caer, gota a gota…en aquellas partes en las que quieres beber hasta embriagarte de placer.

La quinta opción es elegir la torta de tu sabor favorito. Escoge una esponjosa y fresca. Juega con ella como quieras. Lo más importante para tener buen sexo, con ayuda de la comida, es usar la imaginación y darle la oportunidad a los sentidos de guiarte. Ya verás que el cuerpo te permite entregar más de lo que crees.