En un porcentaje significativo las mujeres se han excedido en amar demasiado. Sin darse cuenta son adictas al desamor. ¿Qué hace que las mujeres amen en exceso? En mi experiencia en coaching para mujeres, he descubierto que el amor exagerado, se desarrolla en algunas mujeres por los condicionamientos sociales y creencias limitantes aprendidas desde la niñez. Las mujeres en pleno siglo XXI aún son fieles a los paradigmas de una cultura machista, en donde todavía es pálida la poderosa creencia ilimitada de que las mujeres somos unas Diosas y como tal debemos sentirnos.
He tenido coachees (clientes) que han descubierto al reencontrarse consigo mismas, que son Diosas y han recuperado su autoestima, su amor propio, luego de culminar su proceso de coaching. Para mi es maravilloso ver cómo un porcentaje importante de ellas recuperan su autoestima y transforman su vida. En eso consiste el coaching para mujeres. En acompañar a las mujeres a que aprendan a valorarse y logren sus objetivos personales.
Sin embargo, hay mujeres que se aferran a su adición al desamor por sus mismas historias de sufrimiento. Algunas mujeres desconocen el poder de la mente subconsciente y el poder espiritual que habita en cada una de ellas. Le dan poder al desamor, a las historias de Romeo y Julieta, a los cuentos de hadas donde la princesa antes de encontrar el verdadero amor, tiene que sufrir.
También son fieles de manera inconsciente a las creencias de las mujeres del clan familiar y guardan fidelidad a las situaciones que padecieron aquellas mujeres. Para volver al amor, hay que preocuparse por aprender a amarnos. Por fortalecer la autoestima.
Algunas mujeres que aman en exceso son más fieles a las creencias limitantes de la sociedad, prefieren una relación destructiva que aprender a vivir consigo mismas. Se obsesionan con personas que no saben amar. Mujeres es la hora de amarse, de respetarse y de caminar como Diosas, llenas de amor por sí mismas, compasivas, optimistas, poderosas y plenas.
A continuación 15 claves para descubrir si eres adictas al desamor.
- Han crecido en hogares disfuncionales donde la relación de sus padres no fue saludable y desde ese momento la niña interior, adopta la creencia inconsciente de que no son merecedoras de amor y son incapaces de amarse.
- La principal relación de un ser humano es con papá y mamá, dependiendo cual ha sido su relación cuando niña, así se reflejará en su vida adulta, si no hace un alto en el camino para conocerse y sanar su niña interior.
- No hubo evidencias de afecto cuando crecieron, por lo que sienten compasión por los hombres aparentemente “necesitados”.
- Sienten atracción por los hombres inaccesibles” o difíciles, con quienes repetirán la lucha que tuvieron con sus padres para obtener su aprobación.
- Les aterra la idea de que su pareja las abandone, sufren de dependencia y harían cualquier cosa porque la relación no termine.
- Son complacientes en todo; podrían darle dinero, comprarle cosas e, incluso, permitir el abuso.
- Piensan que su pareja algún día “cambiará” y viven con la esperanza de que las cosas serán diferentes ya que ellas con su amor los cambiarán. Vaya creencia errada.
- Se sienten responsables y culpables de todo lo negativo que sucede en la relación.
- Su amor propio es bastante bajo y se sienten inferiores a los demás, tienen una creencia inconsciente de que no merecen ser felices. Se autocastigan.
- Necesitan desesperadamente controlar a su pareja, son extremadamente inseguras, No creen en ellas y adoptan una postura de esclavas.
- Viven en una fantasía, aman tanto que no se dan cuenta de la realidad en la que viven. Se enamoran de los cuentos de hadas. Habita en ellas, una niña interior maltratada.
- Son adictas a los hombres y al dolor emocional; usan las relaciones como una droga para no sentir su propio dolor ya que no tienen la capacidad de creer en sí mismas y en su poder divino.
- Son personas con tendencias hacia las adicciones; ya sea al alcohol, a las drogas o a la comida o al maltrato y sufrimiento, es una forma de auto-flagelarse, dado que cuando niñas, interpretaron de acuerdo a las experiencias vividas que no eran merecedoras de amor.
- Gastan sus energías en relaciones caóticas, inciertas y dolorosas; se olvidan de sí mismas y no se preocupan por sanar su niña interior, por sanar las heridas emocionales de la niñez.
- Son adictas al sufrimiento, son depresivas y buscan la excitación para evitar deprimirse. Buscan saciar su falta de amor en el sexo así tengan una mala relación.
- Sienten una fuerte atracción por los hombres, ya que buscan de manera inconsciente la proyección de su padre y si este fue inestable o misterioso lo consideran como atractivo ya que representa un desafío. Los hombres amables y confiables les resultan “aburridos”.
Todos estos síntomas se encierran en una sola palabra falta de amor propio. Cuando una mujer se ama y se valora, atrae a su vida un hombre fabuloso. Las mujeres que se aman y confían en su naturaleza divina, son atractivas, ya que tienen claro que ellas son las guardianas de sí mismas.
La pregunta del Coach de corazón; giovannafuentes@yahoo.com
¿Qué la ata a una pareja que le genera sufrimiento?
¿Qué ha generado en su vida el amor excesivo por un hombre?
¿Qué tan consciente es de que en cada ser humano habita el poder divino?
¿Qué le impide amarse?
¿Ha hecho un alto en el camino para evaluar qué clase de parejas ha atraído a su vida?
¿A qué creencias limitantes es fiel?
¿Cuáles son las fidelidades al clan familiar de sus generaciones pasadas?